El T-Cross fue el gran protagonista de la jornada de ayer (ver nota). Con llegada segura para la Argentina a mediados del año que viene, forma parte de una ofensiva que en los próximos 10 años nutrirá de unos 30 SUV a la gama de Volkswagen.

Martín Massimino, Gerente General de la marca, asegura que “hasta el momento no había un esquema de trabajo ordenado y bajo el paraguas de una estrategia que hoy tenemos es posible dar el gran paso que significa presentar el primer SUV fabricado en la región”.

Uno de los focos del T-Cross será el equipamiento de seguridad con sus seis airbags de serie. “Será un diferencial en la categoría” confía Massimino. Pero recientemente, VW quitó el ESP de dos versiones del Virtus.

Al respecto, el directivo confirmó que el sedán va a volver a tener ESP de serie a partir de enero. “Se revisó la configuración, en la que habíamos dejado algunos elementos como opcionales para que el producto sea más accesible”, reconoce.

Pero también hubo tiempo para hablar del resto de las novedades en la gama. El único confirmado con fecha es el Vento GLi (la imagen es una recreación), que llegará en el primer trimestre de 2019 con el motor 2.0 turbo de 220 CV.

Para fines de ese año están pensados (aunque el mercado actual todo lo pone en veremos) el Golf GTE (híbrido) y la Amarok V6 con 258 CV, en una clara competencia con la Mercedes Clase X que ofrecerá ese mismo valor para su versión V6.

Quizás para ese mismo tiempo o comienzos de 2020 quedan los Polo y Virtus GTS (la imagen es otra recreación), con motor 1.4 turbo de 150 CV, ideal para los clientes a los que el 1.6 les deja gusto a poco.

Por su parte, la familia Gol/Voyage se va a manterner por ahora sin cambios, tanto en lo estético como en el agregado de la caja automática, en algo que creemos está reñido con el stock de la red.

Y por último, pese a la llegada del T-Cross a un precio similar, la Suran continuará en catálogo gracias a la muy buena performance que tiene, entre otros canales de venta, en el plan de ahorro.