DISEÑO/ESTILO
Sobre una carrocería tricuerpo, GM plasmó las líneas de un sedán de discreta fisonomía pero con volúmenes equilibrados. El sector frontal recuerda mucho al del Agile, principalmente por el formato de sus ópticas, con cuerpo oscuro y luces diurnas.

Los laterales, por su parte, poseen cintura alta y puertas con dos sutiles molduras que se encargan de “cortar” con la simpleza del perfil, que cuenta además con baguetas del color de la carrocería y vistosas llantas de aleación de 15 pulgadas y con terminación pulida. Como el resto del conjunto, la zona posterior del Cobalt recurre a líneas sobrias, realzadas en parte por las llamativas ópticas con acrílico transparente.

INTERIOR/CONFORT
El interior exhibe un ambiente cálido gracias a los contrastes que generan los distintos tonos de grises, mientras que el panel de a bordo que incluye una consola central con radio integrada y generosa botonera y prácticos comandos de climatización, que además poseen buen tacto.

El volante es similar al todos los nuevos Chevrolet, e incluye en su brazo derecho los comandos del audio. Los asientos están tapizados en pana, un material en desuso en el segmento.

El tablero, bien legible y a la moda de los últimos modelos de la marca, ofrece un cuentavueltas analógico de buen tamaño y a su lado un display digital que informa a través de números la velocidad, entre otras funciones.

Con cinco plazas disponibles, el Cobalt se caracteriza por su amplio espacio interiortanto para los ocupantes delanteros como para los traseros; estos últimos gozan de excelente lugar tanto a lo largo como a lo alto del habitáculo. Además, el asiento trasero (se puede rebatir por tercios) posee un cojín de correcto tamaño y un respaldo con acertada inclinación. Este sector sólo se ve penalizado por la ausencia del apoyacabezas y el cinturón inercial para la quinta plaza.

Pese a que se consigue una posición de manejo descansada, la exagerada altura (aún en su punto más bajo) de las butacas delanteras no permiten redondear el conjunto. Además, el cojín es algo angosto.

Los materiales empleados en el interior muestran una destacable calidad y correctos encastres, más aún teniendo en cuenta el segmento al que pertenece.

La insonorización (posee doble burlete en las puertas) es destacada, permitiendo viajes en los que tanto el sonido de la rodadura como del motor y el viento no son una molestia.

El baúl posee generosos 563 litros, lo que lo ubica como el más grande de la categoría. La contra radica en la presentación de la tapa que permite acceder al mismo, ya que no ofrece revestimiento ni agarraderas en su interior. Debajo del piso encontramos la rueda de auxilio del tipo temporal, es decir más fina que las otras cuatro; definitivamente no es la más indicada para nuestros caminos.

Esta versión LTZ dispone de aire acondicionado, dirección asistida, cierre central, espejos y levantavidrios eléctricos en las cuatro puertas, radio con MP3, entrada auxiliar, USB y Bluetooth, llantas de aleación, computadora de a bordo y asiento trasero bipartido.

Sin embargo, acusa algunos faltantes como la regulación en profundidad del volante, la apertura interna de baúl y el tanque y el control de velocidad crucero, sólo presente en la variante automática.

MOTOR/PRESTACIONES
Se trata del conocidísimo bloque de cuatro cilindros, 1,8 litros y 8 válvulas que en los últimos años ha equipado a distintos modelos de Chevrolet (como Corsa II y Meriva) y a algunos productos de Fiat. En el último tiempo ha recibido algunas mejoras que lo volvieron más respetuoso del medio ambiente, ya que cumple la norma Euro 5.

Se muestra vivaz desde la zona inferior del cuentavueltas, a lo que sumado la suavidad y el acertado acople del embrague, brinda placer en el manejo urbano, donde sin embargo desentona la dirección, con asistencia algo “pesada”. En este caso se asocia a una caja manual con acertadas relaciones (a 130 km/h en quinta el motor gira a poco más de 3.500 rpm) y con un selector que ofrece pasos de marchas suaves y precisos.

Las prestaciones están acordes a su propuesta familiar, con una aceleración de 0 a 100 km/h resuelta en unos 11 segundos y una velocidad máxima limitada en los 170 km/h. El consumo muestra valores apenas correctos en ruta, pero elevados en ciudad, ámbito en el que necesita casi 12 litros para recorrer 100 kilómetros.

COMPORTAMIENTO
Destacamos el funcionamiento general de las suspensiones, que le proveen un buen confort de marcha en ciudad, aunque con algunos rebotes cuando el piso está desparejo, y un digno transito rutero.

En las curvas manifiesta reacciones francas y leves inclinaciones de la carrocería, mientras que en lo rectas veloces es estable y en líneas generales se lo siente aplomado; sólo le molestan los vientos cruzados, pero ello no atenta contra su estabilidad.

El generoso despeje, por su parte, es un aliado a la hora de sortear calles en mal estado, como así también lomos y cunetas pronunciadas. Además posee chapón protector de cárter, lo que brinda aún más seguridad.

SEGURIDADEl rubro está compuesto por el doble airbag y el ABS con distribuidor electrónico, ambos elementos disponibles desde la versión LT. A ellos se les suman los faros antiniebla delanteros, los cuatro apoyacabezas y cinturones inerciales y la alarma antirrobo. No cuenta con faro antiniebla trasero y apoyacabezas y cinturón inercial para la quinta plaza, así como tampoco airbags laterales, al menos en forma opcional.

El sistema de frenos, compuesto por discos delanteros y tambores traseros, demostró que puede detener los 1.122 kilos del Cobalt sin perder la línea de marcha y en distancias lógicas (100 a 0 km/h en 42 metros), aunque el ABS tiene tendencia a activarse prematuramente. Además, el pedal es algo esponjoso y posee un recorrido extenso.

PRECIO/COMPETENCIA
Con un precio de 104.200 pesos, esta versión del Cobalt resulta una interesante opción por su relación precio-producto. En un escalón más abajo está la LT, ofrecida a módicos 94.370 pesos. Entre sus competidores encontramos al Fiat Grand Siena, cuya versión Essence parte de los 104.600 pesos (sin opcionales) y el Volkswagen Voyage Highline (116.060 pesos).

Al mismo tiempo, dentro de la propia Chevrolet están el Prisma LT (99.870), el Aveo G3 LT (100.280) y el Sonic LT (130.500). La garantía es dos años sin límite de kilometraje, ubicándose en el promedio de la categoría.