El caballito de batalla de la marca adoptó sutiles cambios estéticos y sumó equipamiento. Probamos la versión full con el 1.4 HDi de 70 CV.
Por Gastón Vanini
Meses atrás Peugeot reemplazó conjuntamente a los dos motores diésel con los que había sido presentado el 207 Compact, allá por septiembre de 2008, es decir el antiguo 1.9 aspirado de 70 CV y el más potente y moderno 2.0 HDi (inyección common rail y turbo) de 90 caballos.
El nuevo integrante de la familia es el 1.4 HDi, y por la tecnología que emplea se lo podría comparar con el “dos litros”, aunque su potencia es idéntica a la del más añejo. Este turbodiesel es un viejo conocido en la familia PSA, ya que hasta hace un tiempo supo equipar al Citroën C3, sin olvidarnos de que se trata del mismo motor que -con algunas diferencias- también movía a los Ford Fiesta y EcoSport.
Al renovado apartado mecánico, el modelo fabricado en Argentina (versiones 3 y 5 puertas; el resto de sus versiones se hacen en Brasil) le sumó recientemente un sutil rediseño mostrado localmente en el pasado Salón del Automóvil de Buenos Aires. Conozcamos al 207 HDi, rubro por rubro.
DISEÑO/ESTILO
Ya casi está todo dicho acerca del diseño del 207 Compact. Más allá de las críticas de muchos acerca de su pasado de “206”, el modelo continúa vigente y gusta a la mayoría. Para agregar en esta oportunidad sólo nos quedan los sutiles cambios que se dieron en la carrocería.
Los paragolpes ahora cuentan con su zona de contacto de color carrocería, detalle que al principio no nos agradó, pero con el pasar de los días entendimos que no le sienta tan mal el cambio. Eso sí, le jugarán en contra en los toques de estacionamiento, ya que inevitablemente dañarán su pintura.
Lo mismo vale para el paragolpes de sector trasero, que incorpora ópticas que variaron apenas su dibujo y adoptaron una superficie con más acrílico transparente. En tanto, las baguetas laterales suman elegancia por medio de un aplique cromado.
INTERIOR/CONFORT
Sin novedades en el interior, que ofrece una plancha de agradable diseño y con materiales y encastres de acertado nivel teniendo en cuenta los estándares del segmento. El tablero ofrece caracteres claros y una iluminación anaranjada que es bienvenida al caer la noche. La novedad pasa por la radio, que ya no está integrada a la consola central.
La postura frente al volante puede ser correcta para los más bajos, no obstante, se complica para los más “largos”. Es que, como ya casi todos saben, la pedalera de este Peugeot es poco profunda, y encima carece de regulación en profundidad del volante, que podría paliar esa deficiencia. Las butacas de esta versión full poseen diseño deportivo, ofreciendo un plus de sujeción lateral, aparte de regular en altura.
La habitabilidad denota el paso del tiempo transcurrido. No sobra lugar y sólo dos personas podrán ubicarse relativamente bien en las plazas traseras, donde el espacio para las piernas es justo, mientras que el baúl, con 245 litros, ofrece un tamaño pequeño para la categoría.
La dotación de confort de esta versión XT es generosa, destacándose el conocido climatizador automático de una zona, el techo corredizo eléctrico, el nuevo sensor de estacionamiento trasero, la computadora de a bordo y los prácticos comandos de radio al volante, para comandar cómodamente la nueva radio con CD, MP3, Bluetooth y con entradas auxiliar y USB, que ofrece un buen sonido y un manejo intuitivo, aunque con teclas algo chicas.
MOTOR/PRESTACIONES
Con una puesta en marcha instantánea bajo cualquier circunstancia, este HDi de 70 caballos muestra un impecable funcionamiento en todo momento, aunque, por supuesto, su “empuje” y su progresividad se dan a partir de las 1.700/1.800 rpm, cuando entra en acción el turbo, sensaciones distintos a las que proveía el diésel aspirado de idéntica potencia, que remaba de a poco hasta obtener casi las mismas prestaciones que este turbodiesel.
Claramente la potencia no sobra; es cuestión de acostumbrase a ella y saber aprovecharla. Por ese motivo, y si lo que se quiere es obtener reacciones más contundentes -más que nada en el manejo rutero-, es necesario mantener el cuentavueltas por encima de las 2.000 rpm. El HDi también se destaca por su baja sonoridad, más aún cuando se lo compara con el de aspiración normal.
Las prestaciones, por supuesto, son modestas, con cifras esperables para un diésel de esta potencia (0 a 100 km/h en 16,1 segundos y velocidad máxima de 155 km/h). Pero al potencial comprador de este HDi poco y nada le importarán esas cifras, ya que el mayor argumento de este motor es su bajo consumo, con un gasto promedio de 6,5 litros, que sumado a los 50 litros de capacidad del tanque, aseguran más de 800 kilómetros de autonomía, siempre y cuando el manejo no sea temerario.
La caja es la conocida manual de cinco marchas, con un selector de recorridos algo largos, pero con buen tacto y accionamiento seguro de cada uno de los cambios. Caracterizada por sus relaciones largas, no permite encarar esquinas en tercera marcha y a baja velocidad sin que manifieste tironeos, mientras que en quinta a 130 km/h permite que el motor gire a sólo a unas 2.900 rpm.
COMPORTAMIENTO
Un sello del 207 Compact radica en el equilibrado esquema de sus suspensiones, brindándole un ejemplar comportamiento en lo veloz y un paso por curvas con reacciones francas y mínimas inclinaciones de la carrocería. Todo un ejemplo dentro de la categoría.
Su paseo por la ciudad propone una suave absorción de las irregularidades de nuestras ajetreadas calles, inclusive haciendo confortable su paso por lomos de burros y cunetas, donde su correcto despeje evita que rocen sus partes bajas. Resumiendo, el conjunto es de los más destacados del segmento.
SEGURIDAD
En el apartado de la seguridad, el 207 se contenta con doble airbag, ABS y luces antiniebla delanteras y traseras. Poco más se le puede pedir; sólo la presencia de un tercer apoyacabeza trasero.
En lo que respecta a los frenos, éstos muestran un funcionamiento mejorable, con detenciones algo largas (44 metros). En contrapartida, ofrece un buen tacto del pedal.
PRECIO/COMPETENCIA
El precio de este 207 Compact HDi full es de 92.000 pesos, un importe elevado si tenemos en cuenta que estamos hablando de un auto del segmento B.
Al día de hoy no tiene rivales a la vista, ya que Fiat por el momento no cuenta con el Punto JTd, y Ford dejó de ofrecer el Fiesta TDCi. Por último, su garantía está dentro de las convencionales, con dos años sin límite de kilometraje.
Lo Bueno
Equilibrio de suspensiones
Estética atractiva
Equipamiento de confort
Consumo/autonomía
Lo Malo
Dirección pesada
Respuesta en baja
Habitabilidad
Precio elevado
FICHA TECNICA
Motor
4 cilindros, 8 válvulas
Cilindrada: 1.398 cm3
Alimentación: Diesel
Potencia: 70 CV
Torque: 16,3 kgm
Transimisión
Caja: Manual de 5 marchas
Tracción: Delantera
Frenos: Disco ventilado/tambor
Tren de Rodaje
Suspensiones: McPherson/Eje rígido
Dirección: Hidráulica
Neumáticos: 185/60 x 15″
Dimensiones y Capacidades
Largo/Ancho/Alto: 3,872/1,669/1,441 mm
Peso: 1188 kg
Baúl: 245 litros
Tanque: 50 litros
EQUIPAMIENTO DE CONFORT
Butaca y volante regulable en altura
Climatizador automático
Llanta de aleación
Pack eléctrico
Sensor de estacionamiento
Techo corredizo
EQUIPAMIENTO DE SEGURIDAD
Airbags frontales
ABS
Apoyacabezas (4)
Cinturones inerciales (4)
Faros antiniebla del/tras
PRESTACIONES
Aceleraciones
0-100 km/h: 16,1 s.
0-400 metros: 20,2 s.
0-1000 metros: 37,5 s.
Recuperaciones
80-120 km/h en 4°: 14,5 s.
80-120 km/h en 5°: 18,8 s.
Frenada
100-0 km/h: 44,0 mts.
140-0 km/h: 87,2 mts.
Consumos
100 km/h: 5,1 litros/100 km.
130 km/h: 7,1 litros/100 km.
Urbano: 7,2 litros/100 km.
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